domingo, 12 de diciembre de 2010

El estrecho desde Tarifa (Óleo)

2 comentarios:

  1. Se despertó aturdido , por un instante no se situó en el tiempo hasta que su cerebro comenzó a trabajar , eran las 10.30 de la mañana , ahora si . A su lado estaba su angel y a sus pies su angelito , tenía 6 años. El sonido de la rutina de aseo diario les despertó y el pellizco de su estómago le apremiaba a apremiarles…..bajaron recien vestidos y descansados , era agosto , siempre era agosto.
    Al acabar el primer tramo de las escaleras se tropezaron con una preciosa postal , cualquier otro la hubiese contemplado , sin más. Ellos la abrieron y la atravesaron como el espejo de Alicia . Una vez al otro lado , la suavidad de la luz que llamaba al cristal relajó sus sentidos , un olor a recuerdos se plantó en su memoria . La postal cobró vida , vida con sabor a sal y arena , a risas de sus dos ángeles , a brisa que no despeina y de la que si , a calorcito del que no agobia , a desayuno templado , a pan tostado de mamá , a sonido de bicicletas suicidas pilotadas por risas con niños , a lápices nuevos , al aftershave de papa , al carrito de mi niño , a la luz impertinente del faro , a paseos por la isla……..Un imparable torrente derramaba su memoria.
    ¡¡Era una ventana mágica solo a los buenos momentos!! .
    Por eso , ahora , esa postal vive en casa..
    Gracias Jaime.

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