Panorámica de la Plaza de España de Vejer mas conocida como Plaza de los pescaditos (Óleo) 100x50 cm

Iglesia de San francisco -San fernando

Atardecer en Cabo de Gata (Óleo)

A Ginés le fascina su playa. Él la llama El puntón, supongo que por el peñasco que se adentra en el mar. 

A partir de ahora podrá verla cada día en el salón de su hogar y desearía, cada vez que lo hiciera, que recordara que cuenta con todo mi respeto y amistad.    

Patio del Mayorazgo (Vejer) Óleo

Iglesia de la Pastora (San Fernando) Óleo, para mis amigos Luis y Ana

EL PASADO YA LO PERDIMOS, EL FUTURO ES INALCANZABLE. SOLO EL PRESENTE ES NUESTRO.

Construida a finales del siglo XVIII por Esteban Cróquer, es una de las más antiguas iglesias de San Fernando, ciudad que cuente con varias iglesias de esta época, como la Iglesia Mayor de San Pedro y San Pablo y la Iglesia del Carmen

Un hombre solo (Óleo)

La tristeza no avisa. Se acerca, poco a poco, arrastrándose bajo tu pies. Sube por  piernas  hasta tu pecho y no te has dado cuenta cuando ya ha envuelto tu corazón. 

Iglesia Mayor de San Fernándo (Óleo)

ABANICO DECORADO (12€)

Parque natural de la bahía de Cádiz en San Fernando

 Aunque os parezca un vertedero esto es el Parque Natural Bahía de Cádiz en San Fernando. Si vas a correr o pasear por el encontrarás, además de una rica flora y fauna, botellas, bolsas de basura, carritos de super, neumáticos, aguas fecales y demás restos de las miserias humanas. Algunos de estos regalos que los ciudadanos depositamos en el Parque  llevan meses y hasta años sin que nadie los recoja.
A la gente de a pié no se nos cae la cara de verguenza y por supuesto tampoco a la policía medioambiental ni a la consejería de medio ambiente del Ayuntamiento, ni a los de la Junta , ni a la pomposamente llamada Junta Rectora del Parque,  ni a nadie.
Podemos pensar que la responsabilidad es de nuestro políticos calificándolos de ineficaces, corruptos o irresponsables,  pero si nosotros, los ciudadanos, no hacemos nada, estaremos ni mas ni menos, a su altura  

Flores al óleo

El Faro de Chipiona

Una de las torres de la Catedral de Cádiz vista desde la Plaza de S. Juan de Dios (Óleo)

La Caleta un día de tormenta (Óleo)

No recuerdo la primera vez que pisé esta playa. Posiblemente lo hice en brazos de mi madre. A partir de ese momento creo que he pasado mas tiempo en ella que en mi casa. Sobre este mágico trozo de arena y mar aprendí a conocer la amistad y el amor, en ella crecí con mis amigos y besé por primera vez a mi compañera de toda la vida. Después de tantos años mi playa sigue inmutable.

Yo, bastante mas mayor, miro hacia atrás y me doy cuenta con satisfacción que dificilmente podría haber tenido una infancia mas feliz   

Caserón norteño (Óleo)

Flores para mi amiga Ana (Acrílico)

Garita en la Caleta (Cádiz)

Tulipanes (Acrílico)

Carmen, Carmela, Mela, Rodri, Carmelita, More. Tan pequeña como enorme. Siempre pendiente, siempre dispuesta, siempre entregada. Pasional y fuerte como un junco para los demás pero sensible y dependiente de los suyos que dan sentido a su vida.    Gracias por todo

  

Reposando en la playa (Óleo)

Los niños del parque (Óleo)

Desconfía de los gobernantes, de la suerte y del amor.

                                     Sobre todo cuando te sonríen

El muelle del Tinto de Huelva (Óleo) para Rebeca y Carlos

Detalle de la Alameda de Cádiz (Óleo)

Papa solía morirse dos veces al día.

 Cuando abría los ojos cada mañana su ya machacado corazón se partía en mil pedazos al darse cuenta de que mamá no estaba a su lado y antes de cerrarlos cada noche, los mil pedazos se hacían añicos cuando la buscaba en su cama  y no la encontraba.

A partir de ese momento volvía a la vida y paseaba con ella de la mano por las calles de barrio, le robaba besos en el parque o le regalaba flores el día de su aniversario.

Al despertar sus dedos palpaban las sábanas vacías y su corazón moría de nuevo

Baluarte de la Candelaria de Cádiz (Óleo)

El baluarte de La Candelaria formaba parte del frente marítimo de la Bahía que protegía la entrada al puerto y el frente noroeste de la ciudad.

Fue construido en el año 1672 por iniciativa de don Diego Caballero de Illescas, cuando era gobernador de la plaza, con la intención de proteger la entrada natural al puerto de Cádiz. Dada su posición, sufrió los continuos embates del mar, siendo ingenieros militares de la talla de Ignacio Sala, Juan Zapatero y Antonio Hurtado los que ejecutaron las reparaciones.. En el siglo XVIII se montó una explanada con batería a barbeta.

Ha servido de cuartel, maestranza de ingenieros, palomar del servicio colombófilo del cuerpo de ingenieros.

Cádiz al atardecer (Oleo) para Eva y Manolo

Cádiz es todo para el mar,

     El mar es todo para el amor

          

                     Fernando Quiñones    

La noche estrellada para mi amigo Fran (Espero que Vincent no se enfade)